8/1/17

MP[Francia 2] De Montpelier a España y el cruce de los pirineos por el Col d'Ares


Caminos entre campos cultivados con viñas y un frío amanecer. Camino a Narbona

Dejé Montpelier una fría y lluviosa tarde con dirección sur, directo a la costa. De camino muchos edificios extravagantes, centros comerciales, coches y muchas calles para estos, pero entre todo esto una ciclovía que se extiende hasta el mar, aunque se ve muy lejana la tranquilidad, más acercándose a la costa el ambiente cambia cuando aparecen unas enormes lagunas, que por suerte, se han conservado en buen estado.

En palavas-les-Flots pasé dos días, disfrutando mi primer encuentro con el mar mediterráneo. Corrí y caminé por sus orillas, e incluso pensé en bañarme pero el frío me contuvo. Luego tomé el camino de la costa que va entre grandes lagunas y pantanos, donde los flamencos se posaban y disfrutaban la soleada tarde. Me invadieron las ganas de acampar ahí pero el camino debía continuar. Pedaleros en el camino me animan, se toman fotos conmigo, me ven como un rockstar de la bicicleta, es divertido.

Llegó a Sete, una hermosa ciudad de la costa invadida de gente, me comentan que son las vacaciones y se vienen las fiestas, navidad (Noel en Francia) y luego año nuevo. Sigo mi camino y llegó a Marausan (cerca de Braziers) muy tarde, eso si, disfruto las vistas nocturnas de esa ciudad.

Al día siguiente continuo hasta Narbona, tomando caminos que van entre campos de uva abrazados por una espesa neblina. Hermosos puentes de arco van apareciendo. Más adelante conecto con una ciclovía que va por el costado del Canal du Midi. Es una huella muy tranquila para pedalear, aunque el invierno la ha colmado de barro, aún así la prefiero antes que a la carretera. Poco antes de llegar a Narbona, la ruta se me pierde y no encontré forma de cruzar el río más que por una vía del tren, fue el momento tenso del día, aunque dos días después supe que se trataba de una anciana línea del tren en desuso.

Y desde Narbona nuevamente a la costa para volver a pasar entre grandes lagunas y una ruta que va entre estas. La lluvia no apaga mi ánimo de continuar, así hasta llegar a Perpignan, linda ciudad y muy amiga de las bicicletas. Desde aquí comenzó mi planificación para cruzar los pirineos, tenía varias alternativas pero de todas formas quería cruzar por altura. Finalmente me decidí por el paso Col d'Ares, que está a unos 1600 msnm. Tomé rumbo al paso y apenas abandoné Perpignan aparecieron los primeros pirineos nevados, era lo que me esperaba.

El camino a los pirineos fue de mucha calma. Acampé una fría noche cerca de Arles-de-Tech y luego continué subiendo hasta llegar a Lamanera, el pueblo más austral de Francia. El camino hasta aquí fue tranquilo, con lindos paisajes de tonos otoñales y pueblos escondidos entre las montañas.

Al cruce de los pirineos le faltaba intensidad, aventura, rasguños, frío. Decidí entonces tomar un sendero de trekking (no un camino). Fue una dura jornada, me tomó toda la tarde llegar hasta el límite, cargué la bicicleta casi todo el camino, nos caímos dos o tres veces, me rasguñé completo, pero la recompensa .. una increíble noche estrellada y mi primer vistazo a España. Una anécdota, en el límite existe un cerco electrificado, ¿adivinen a quien le dio la corriente?


Mi primer encuentro con el mar mediterráneo. Me

Este perro es un buen ciudadano. Con todas las ganas de ir al mar, no entra ya que no lo tiene permitido. (letrero de la derecha)
Palavas-les-Flots. Un lindo atardecer entre los botes



Unos humedales en reserva, entre Palavas-les-Flots y Séte

Flamencos en el Etang des Moures, cerca de Séte

Séte. Que linda ciudad en la costa, con sus canales y edificios, según muchos amigos se parece a Venecia. 

Una iglesia de Capestang. Aquí cuenta la historia que fueron fusilados varios miembros de la resistencia francesa, en la segunda guerra mundial



Que camino nos regala el sur de Francia. Esta es una ciclovía que se extiende por todo el canal de Midi

Momento tenso de una jornada. Se terminó una ciclovia que seguía y no encontré forma de cruzar más que por el puente de los trenes. Esperé un momento y me decidí. Eran unos 60 metros de puente

El museo lapidario de Narbonna.

Una pausa en el camino para comer, mientras cae una fuerte lluvia. Esto es camino a Perpignan

Dejando Perpignan, una perfecta ciclovía con los pirineos de fondo. Era lo que me esperaba

Un pequeñito pueblo camino a los Pirineos. los pirineos de fondo
Arles de Tec, camino a España a través de los Pirineos, por el paso Col-D'ares.



Mi primer campamento en los pirineos franceses, cerca de Arles-de-tech

Ya muy cerca de los Pirineos

En Lamanera, la comuna más austral de Francia, a solo 8 km del límite con España. Hermoso pueblo, pero se está quedando sin habitantes. Las casas de la foto, son de mampostería de piedras construidas por antiguos ganaderos.

Mi primera vista a España, justo desde el límite, sobre los Pirineos, a unos 1300 msnm
Mi primera foto en España. Atrás, los cercos que separan España de Francia, son cercos electrificados, lo supe por que justamente me dio la corriente.



Mi campamento en el límite de Francia y España. El lugar me regaló un hermoso cielo estrellado por la noche y un gran amanecer, todo con unas gotas de frío por la noche.

------------------------------------------------------------------------

Participamos en esta aventura,

Nadapablo y la compañera bicicleta de viaje, Margot y Ludo en Palavas, Sandrine y Paco en Marousan, Verónique y Pablo en Narbona, Ariadna en Perpignan y Thiabud en Lamanere. Me traigo el mejor recuerdo de ustedes amigos

0 comentarios:

Publicar un comentario